El proceso electoral que actualmente se vive en San Luis Potosí
deja
mucho que desear y cada vez resulta más decepcionante.
Muy lejos quedó aquel escenario que se dibujaba en el último
trimestre
de 2014 cuando se antojaba una contienda cerrada por el Gobierno del
estado de San Luis Potosí, con candidatos carismáticos y con
liderazgo.
Lo que observamos hoy es una lucha por el poder donde el tuerto es rey.
Esto quedó de manifiesto en el primer debate entre los candidatos
y
candidatas que aspiran a gobernar a nuestro estado, pues no solo
mostraron su deficiente lectura, exhibieron también su falta de
dominio
e intereses por los temas que son fundamentales para los potosinos.
No mostraron propuestas, pero tampoco tuvieron la capacidad de convencer o
por lo menos emocionar a los electores.
Y lo mas doloroso de esta situación, tal y como lo planteaban
los
expertos durante la mesa de los martes en Fórmula de la
Mañana, es que
se supone que quienes son candidatos o candidatas al Gobierno del
Estado,
son los mejores perfiles de sus partidos.
El pasado viernes, al terminar el debate algunos radioescuchas y
televidentes preguntaban quién ganó el debate, a
título personal puedo
asegurarle que no hubo ganadores, todos perdieron, el CEEPAC
perdió,
pues no logró ni convocar a todos los medios de comunicación
en torno a
la transmisión del debate, ni mostrar capacidad de
organización.
Perdieron los candidatos y candidatas, porque lejos de mostrar sus
propuestas, mostraron sus deficiencias, sus carencias, no convencieron.
Pero quienes más perdimos fuimos los ciudadanos porque nos negaron
la
posibilidad de escuchar que proponen para San Luis Potosí, de
tener
elementos para poder tomar una decisión y en consecuencia tendremos
que
elegir al menos malo y no al o la mejor.
Todos perdimos, sin embargo queda una ultima oportunidad para mejorar
el
escenario. Estos últimos días de campaña los
candidatos y candidatas
tendrán que convencer y no será con promesas falsas ni con
slogans o
frases vacías. Deberán realmente de aprovechar el tiempo y
los
espacios.
Y por supuesto, tanto el CEEPAC como los candidatos y candidatas
están
obligados a corregir los errores y ofrecer un segundo debate mejorado,
la
pregunta es: ¿podrán?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario