viernes, 22 de mayo de 2015

Por la boca muere el pez


Esta semana, el ya de por si cuestionado Instituto Nacional Electoral, volvió a ser foco de atención y de escándalo, cuando se hizo pública una grabación telefónica donde su Consejero Presidente,  Lorenzo Córdova, se burla, con singular alegría, de un indígena.


El asunto se vuelve por demás inoportuno, ante la cercanía de la jornada electoral, pues no sólo le resta seriedad a la autoridad electoral, además, genera o acrecienta la crispación social y contribuye a restar legitimidad al INE.


El asunto no es menor, y aunque el acceso a esa conversación resulta a todas luces ilegal, la forma no justifica ni exenta del fondo del asunto, y el fondo es que la persona sobre quien recae la máxima responsabilidad de velar por la democracia en nuestro país, no sólo no se toma en serio su labor, además la padece y demuestra que no tiene el más mínimo respeto por los diferentes sectores poblacionales.


Queda claro que tenemos a la cabeza del INE a un personaje nefasto, eso nadie lo discute, el problema es qué hacer con él.

De inmediato partidos políticos se apresuraron a pedir su renuncia, pero a estas alturas del partido eso implicaría el tener que nombrar a un nuevo presidente del INE y a un nuevo consejero, tarea que recaería en el poder legislativo federal y, dicho sea de paso, no se ve factible que los partidos políticos se pongan de acuerdo en la antesala de una competida elección.


En el otro escenario, Lorenzo Córdova podría seguir como sí nada, burlándose de cuánta persona se acerca en búsqueda de la asesoría de la autoridad que representa. Sin embargo, su simple permanencia al frente del INE genera desconfianza hacia la autoridad electoral y le resta confianza a la elección en sí.


Una tercera posibilidad es que renuncie sólo a la Presidencia del INE pero eso no garantiza que se le quite presión al órgano electoral.


Cualquiera que sea el escenario, el perdedor siempre será el ciudadano, que tristemente ve en qué se ha convertido el órgano que debería ser garante de la democracia.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario